CONTENIDO
Presentación
I. Marco Institucional Vigente
II. Diagnóstico General
III. El Minifundio y la Reconversión Productiva
IV. Hacia una Política Económica Sectorial
a) Líneas de acción para producción de autoconsumo
b) Líneas de acción para productores comerciales
V. Ciencia y Tecnología Aplicada
VI. Financiamiento para el Desarrollo
Presentación
Una economía está conformada por tres sectores: el
agropecuario, el industrial y el de servicios, los tres son indispensables para
el desarrollo equilibrado y sostenido de una economía, cuando alguno de los
tres no se desarrolla al ritmo que requieren los demás, se rompe el equilibrio,
afectando el desarrollo de los otros y -por tanto- el crecimiento de la
economía en general, justamente lo que
ha sucedido en México.
El documento que presentamos a continuación trata de
reflejar la situación socioeconómica del sector agropecuario nacional. Partiendo
de un diagnóstico general, reunimos los elementos para construir una estrategia
con diferentes líneas de acción, que consideramos necesarias para impulsar los cambios
que el sector agropecuario necesita, para responder a los tiempos y retos que enfrenta
la sociedad nacional.
I. Diagnóstico
General
Abundan los datos institucionales para realizar un
diagnóstico del sector agropecuario nacional, hay autores de libros dedicados a describir esta
situación, pero creo que estamos en un
momento oportuno para transitar del análisis a la propuesta, para ello referimos
algunos datos muy conocidos como marco general y punto de partida.
En México existen 54 millones de pobres, de los cuales,
20 millones viven en pobreza alimentaria y 26 en pobreza de capacidades.
Cerca de 19 millones de mexicanos viven con menos de
un salario mínimo y 11 millones no registran ingresos.
En el campo mexicano vive casi una tercera parte de la
población y genera únicamente el 4 por ciento del Producto Interno Bruto del
país.
Cada año el país pierde 540 millones de toneladas de
suelo y 600 millones de hectáreas de bosque. A la fecha el suelo mexicano ha
perdido el 50 por ciento del agua disponible para cada mexicano.
La OCDE considera que un país debe producir cuando
menos el 75 por ciento de lo que consume, nuestro país produce escasamente el
53 por ciento, el déficit general productivo sobrepasa el 22 por ciento, una
situación sumamente delicada para la economía nacional.
Según la FAO, en el 2011 México fue el país donde más
disminuyó la producción de alimentos, se ubicó únicamente por arriba de algunos
países africanos.
El sector primario de nuestra economía está enfocado a
la producción de variedades agropecuarias de muy bajo valor económico. Las
prácticas productivas tradicionales atentan contra los recursos naturales y el
medio ambiente.
Es necesario buscar la solución a una situación que se
agrava cada día, aprovechando la información y los recursos científicos y
tecnológicos para estudiar y revertir
esta situación.
II.- Marco
Institucional Vigente
a) Por una Reingeniería Institucional
Diagnóstico:
Recordemos que a finales de la primera mitad del siglo
pasado, las potencias que participaron en la Segunda Guerra Mundial descuidaron
sus sectores productivos y se convirtieron en importadores de alimentos, el
sector agropecuario mexicano fue uno de los beneficiarios de ello, y gracias a
esta circunstancia, para los sesenta había conformado un modelo sustitutivo de
importaciones y las instituciones que lideraban el sector fueron las idóneas
para ese momento.
No obstante, al finalizar la guerra vino la
recuperación de los países participantes, se puso en marcha un nuevo modelo
económico neoliberal, que sugirió abrir las economías a un mercado mundial
regido por la innovación y reconversión productiva y la competencia global.
México no cambió ni adecuó su modelo y al llegar al presente siglo el sector se
convirtió en una carga para el Estado Mexicano.
Las dependencias gubernamentales han cambiado de
nombre, han modificado sus programas, han implementado acciones para responder
a ciertas demandas, pero sobrerregularon el acceso a sus programas y recursos, sin llevar a cabo una reingeniería
para enfrentar las necesidades que tiene el sector agropecuario de adaptarse a
la nueva realidad económica mundial, ante ello proponemos las siguientes:
Líneas de Acción
·
Creación del Consejo
Nacional Agropecuario
·
Elaboración de un
plan sectorial por: segmento productivo, vocaciones productivas regionales,
cadenas de valor y oportunidades de mercado.
·
Impulsar la
modificación del marco normativo de la Secretaría de Agricultura, Ganadería,
Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), dándole tareas vinculantes
para: el estudio del territorio, identificación de vocaciones productivas,
fomento a la integración de cadenas de valor y unidades productivas,
integración de agro-parques y diseño de mecanismos de comercialización.
·
Facultar a la
SAGARPA como dependencia rectora en la elaboración de criterios para el diseño
de programas sectoriales regionales, estatales y municipales.
·
Impulsar la mejora
regulatoria en la operación y acceso a los recursos y programas de la Secretaría
de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA).
·
Mejoramiento de las
Reglas del Fondo Nacional para Desastres Naturales (FONDEN) para agilizar el
pago por siniestros naturales en agricultura y ganadería.
·
Impulsar la
transformación de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) e impulsar la
creación de la Secretaría del Agua.
·
Otorgar a la
Secretaria del Agua un perfil rector normativo vinculante y ejecutivo en
políticas públicas de infraestructura, uso, tratamiento y reutilización de
agua.
III.- El
Minifundio y la Reconversión Productiva
Diagnóstico
En el último cuarto del siglo pasado vivimos una
fuerte depresión productiva de la forma social de tenencia de la tierra
conocido como minifundio o ejido, cuyo promedio de propiedad apenas llega al
1.7 hectáreas por ejidatario, lo que ha vuelto incosteable la capitalización mediante
la incorporación de sistemas tecnológicos de productividad eficiente.
Por otra parte, se ha dicho que lejos de disminuir, el
minifundio se ha incrementado al dividirse las parcelas de ejidatarios de la
primera generación entre los hijos que están adquiriendo derechos, un paradigma
que debemos superar mediante distintos mecanismos que regularicen la propiedad
de la tierra.
Líneas de Acción
·
Impulsar las
modificaciones necesarias al artículo 27 constitucional para adecuarlo a las
necesidades de asociación y capitalización del ejido mexicano.
·
Fomentar el
asociacionismo ejidal para consolidar unidades productivas tecnificables y
rentables.
·
Impulsar la
reconversión de la agricultura minifundista a cielo abierto por agricultura protegida
mediante invernaderos tecnificados, sistemas de acolchado, cintilla y otros.
·
Impulsar la
construcción de centros de acopio tecnificados para la consolidación de
volúmenes de venta y transformación agroindustrial.
·
Fomentar la
organización y agricultura por contrato con base en la consolidación de
volúmenes producidos en el minifundio.
IV. Hacia una
Política Económica Sectorial
Diagnóstico
En el siglo pasado también vivimos en México un auge importante
en la organización de los productores agropecuarios con fines políticos, esto
propició una cultura de participación basada en la demanda de recursos y apoyos
en especie, los productores no tuvieron incentivos para orientar sus sistemas
productivos hacia la eficiencia y productividad competitiva, y las
instituciones gubernamentales se conformaron con tener estabilidad en el sector
sin buscar arraigar en la gente una concepción económica del desarrollo.
Hoy es necesario corregir este error histórico y proponer
un trabajo con rigor administrativo, que nos permita plantear una política
económica orientada a la productividad del sector, que trate diferenciadamente
a los productores de autoconsumo y a productores comerciales, definiendo para
cada uno los programas y apoyos específicos pertinentes; es urgente empoderar a
los productores con una mentalidad empresarial, para garantizar una actividad
agropecuaria con contenidos de reproducción ampliada del capital.
a) Líneas de Acción para Producción de Autoconsumo
·
Organización social para
la capacitación con mejores prácticas productivas.
·
Impulsar un programa
social de siembra con semillas mejoradas.
·
Tecnificación de
parcelas, huertos, solares y traspatios.
·
Programa Nacional de
Mejoramiento Parcelario para la recuperación de suelos y humedad.
·
Creación de un
Programa Nacional de Centros y Parcelas Demostrativos para la seguridad
alimentaria.
·
Impulso a la diversificación
de la producción en baja escala con propósitos de seguridad alimentaria.
·
Impulso al manejo de
técnicas de retención, cosecha, almacenamiento, uso y reutilización de agua.
·
Implementar un
programa social de adquisición de herramientas y maquinaria eficiente.
·
Promover un programa
de asesoría para la compra consolidada de insumos.
·
Impulsar un Programa
Nacional de Mecanización del Campo mediante centrales de maquinaria y equipo
·
Fortalecer la
mecanización de la cosecha de caña de azúcar para reducir la contaminación por
quema
b) Líneas de Acción para productores comerciales
Agricultura
·
Creación de un
Sistema Nacional de Capacitación, Asistencia Técnica e Innovación para el Campo
·
Elaboración de un
estudio del territorio nacional por meso regiones, entidades federativas y
municipios, para identificar vocaciones productivas susceptibles de traducirse en
cadenas de valor.
·
Sustituir la política
de desarrollo agropecuario general por una política económica particular que
desarrolle las vocaciones productivas y cadenas de valor.
·
Fomentar la
organización de los productores en cada vocación para alentar la asociación en torno
a unidades productivas.
·
Impulsar la capacitación
de productores en función de las necesidades de cada unidad productiva.
·
Impulso al extensionismo
rural para garantizar el éxito de los programas de fomento.
·
Impulsar el
extensionismo rural mediante técnicos especializados en desarrollo de cadenas
productivas.
·
Impulso a las
unidades productivas con las herramientas institucionales de financiamiento y
capitalización.
·
Integración de las
unidades productivas en cadenas de valor.
·
Integración de las
cadenas de valor en agroparques.
·
Diversificación de
la producción agrícola con criterios de rentabilidad y en función de las
necesidades del mercado
·
Creación del
Programa Nacional de Apoyo a la Herbolaria, Cultivo de Plantas Medicinales y
Aromáticas
·
Impulso a la
producción en gran escala de higuerilla, jatropha y otras variedades para el
desarrollo de energías alternativas
·
Promover la
inversión privada en procesos de transformación y comercialización.
·
Impulso al desarrollo
de empresas proveedoras de insumos (fertilizantes, semillas, etc.)
·
Creación de un
Sistema Nacional de Aseguramiento Agrícola
·
Instituir los
reconocimientos en sanidad e inocuidad agrícola.
·
Fortalecimiento de
los Comités Estatales de Sanidad Vegetal.
Ganadería
·
Consolidación de los
programas de mejoramiento genético del ganado ovino, bovino, caprino, porcino,
caballar y otros.
·
Impulso al
mejoramiento de praderas para la ganadería.
·
Impulso al cultivo
de granos forrajeros.
·
Implementación de un
programa de reemplazo a la ganadería extensiva en zonas cuyos ecosistemas se
encuentren deprimidos, promoviendo la tecnificación de esta actividad.
·
Impulso al
establecimiento de plantas de alimentos concentrados.
·
Impulsar un programa
de apoyo a los productores pecuarios para la capitalización de unidades
productivas comerciales.
·
Implementación de un
programa de apoyo para la conversión de rastros municipales y mataderos
particulares en rastros tipo inspección federal.
·
Diseñar una política
de apoyo a la inversión privada para la construcción de centros
industrializadores de productos cárnicos para el mercado nacional y externo.
·
Creación de un
Sistema de Aseguramiento Ganadero.
·
Hacer obligatorios
los reconocimientos en sanidad e inocuidad ganadera.
·
Fortalecimiento de
los Comités Estatales de Sanidad Animal.
Acuacultura
·
Creación de la
Secretaría de Pesca y Acuacultura.
·
Programa de
Capacitación y Fomento a la Acuacultura.
·
Fomento a la cría de
especies piscícolas en cuerpos naturales y obras de retención de agua.
·
Repoblación
tecnificada de especies acuícolas en ríos y cuerpos de agua.
·
Desarrollo de un
Programa de Infraestructura y Equipamiento para la Producción Acuícola.
·
Impulso al consumo y
comercialización de especies acuícolas locales.
Obras hidráulicas
·
Construcción
estratégica de grandes obras de almacenamiento de agua vinculadas al desarrollo
de corredores agroindustriales.
·
Impulsar un extenso
programa de fomento a la construcción de sistemas meso regionales, micro
regionales y locales, mediante la construcción de medianas y pequeñas obras de
retención y cosecha de agua.
·
Remplazo paulatino
de los sistemas de riego rodado y aspersión por sistemas de goteo e hidroponia.
Silvicultura
·
Implementación de un
Programa Nacional de Educación, Protección, Cuidado y Recuperación de la
Biodiversidad
·
Impulsar el Programa
Nacional de Recuperación de Áreas Forestales
·
Impulsar las
Declaratorias Federal y Estatales de inafectabilidad de la pequeña propiedad
forestal
·
Incorporación de
toda la superficie forestal nacional a los programas de manejo sustentable
·
Impulso a la
investigación científica para el mejoramiento genético y especies de rápido
crecimiento
·
Promover la asesoría
técnica para obtener la certificación de predios forestales y agropecuarios con
manejo sustentable
·
Diseñar programas
específicos para la restauración o preservación de ecosistemas en la pequeña
propiedad
·
Implementar un
programa preventivo de incendios
·
Establecer un
sistema para la vigilancia conjunta y denuncia de tala clandestina y
contrabando de madera
·
Instrumentar un
programa permanente de supervisión de aserraderos e industrias registradas,
para evitar que trabajen con materia prima producto de tala clandestina y
contrabando
·
Mayor difusión y
apoyo al cultivo y aprovechamiento del bambú
V.- Ciencia y
Tecnología Aplicada
Diagnóstico
Ha sido una realidad evidente que la actividad científica
y tecnológica están separadas de los problemas y necesidades de la economía agrícola.
La amplia y rica gama de investigadores con que cuenta
el país, en escasa medida ha vinculado sus actividades científicas con el problema
cotidiano del productor agropecuario o agroindustrial, por eso es de la mayor
importancia trabajar en la conectividad de estas dos áreas estratégicas.
Líneas de Acción
·
Impulsar la
investigación biotecnológica para mejorar la adaptabilidad de nuestras especies
agropecuarias al cambio climático.
·
Impulsar en los
centros de educación superior la especialización en investigación aplicada a
problemas o productos agropecuarios específicos.
·
Propiciar que cada
centro de educación superior o centro de investigación, se vincule a una o
varias unidades productivas para integrar las cadenas de valor.
·
Impulsar ante los
centros de educación superior la formación profesional de Técnico en Desarrollo
de Vocaciones Productivas y Cadenas de Valor.
·
Fomentar la
industrialización in situ de
productos agropecuarios.
VI.
Financiamiento para el Desarrollo
Diagnóstico
Durante la década de los sesenta y setenta los
productores agropecuarios contaban con opciones financieras de apoyo a la capitalización:
el BANRURAL, instituciones o programas contra siniestros o pérdidas en la
agricultura y ganadería como la Aseguradora Nacional Agrícola y Ganadera
(ANAGSA), no obstante diferentes
problemas sociales y financieros los llevaron a la quiebra y sobrerregulación,
disminuyendo sus posibilidades de apoyo. Sin embargo, es primordial rediseñar mecanismos
esenciales para capitalizar al sector.
Líneas de Acción
·
Impulsar el rediseño
y fortalecimiento de la Banca de Desarrollo.
·
Alentar la
diversificación de líneas de financiamiento a las unidades productivas
agropecuarias certificadas.
·
Mayor promoción a los
programas de financiamiento gubernamental complementario.
·
Creación de un
Sistema Nacional de Microcréditos para Mujeres y Jóvenes que produzcan en el
campo.
·
Promover programas
sociales y privados de asesoría financiera.
·
Proponer la
obligatoriedad del concepto rendición de cuentas en los programas de
financiamiento público.
·
Impulsar la
normatividad y rediseño de la política financiera contra riesgos productivos
agropecuarios.
·
Apoyar la
capitalización y productividad competitiva mediante la promoción de un régimen
fiscal “cero” para las actividades agropecuarias.
Es urgente mejorar la política económica del sector
primario, una política que vaya de lo general a lo particular por vocaciones
productivas regionales, por áreas de oportunidad y por cadenas de valor,
teniendo como premisa central y transversal en la planeación la conservación,
uso y reúso del agua.